En raras ocasiones, narró que un hombre se perdió la peregrinación del Profeta, que Dios lo bendiga y le conceda la paz, y su pecho se apretó por lo que vio al Profeta, que Dios lo bendiga y le conceda la paz, y dijo : Si te pierdes el visita, visita a la tumba de Abdullah bin Ahmed Tabataba . El dueño de la visión era del pueblo de Egipto, que Dios tenga misericordia de él .