Ver a los pequeños

Y quien ve a un niño que es conocido y ve en él algo que le agrada, entonces es bueno y una bendición, y si ve en él de qué es vergonzoso, entonces su plata, y si es desconocido, entonces hay dos caras en ella se decía un enemigo o una buena noticia y quien la veía como si se hiciera joven se decía que tiene una gran deficiencia en su religión o mundo y se dice que muere y a quien ve que se le presentó un joven de buen rostro, pues se interpreta en dos rostros de rey y buenas nuevas. Si no lo llevaban en brazos, y se decía que el que veía que llevaba un pequeño en un pañuelo se decía que se salvó de ellos y angustiaba aquello con lo que el pequeño no estaba atascado, y se decía que si tenía miedo, estaría a salvo. Gritó por un niño, porque se habían ido, y se dijo que sus pecados estaban trastornados, y quien veía un bien pequeño, sería bueno y beneficioso, y se decía que el que veía que llevaba un niño pequeño es mejor que el que lleva uno pequeño.