Y quien ve que sospecha un arma, entonces tiene un paraíso de vergüenza, y tal vez era bueno en religión, y si tenía miedo, seguridad o enfermo, Dios lo curó o viajaba, regresaba a su familia sano y salvo, y quienquiera que fuera. vio que estaba entre un pueblo que tenía armas y no tenía arma y se le veía entre ellos, entonces le arrojan palabras y no le alcanzan con odio Y si no hay angustia ni disputa entre ellos, entonces es un baluarte y una guardia para ellos de sus enemigos, y quien vea que sus armas le fueron robadas, esto es un debilitamiento de su autoridad y fuerza